Había una vez un rey que se llamaba Shahrayar. Este rey se casó con muchas mujeres. El primer día de la boda mataba a sus mujeres, ¡a todas!. Siempre así.
Un día se casó con otra chica llamada Shahrazad (en español, Sherezade). Ella sabía que al día siguiente la mataría. Entonces, por la noche, empezó a contarle una historia que no terminaba hasta la mañana. El rey se dormía, y entonces no a mataba porque todavía quería saber el resto de la historia. Y así siguió todo durante mil noches. Cuando la historia por fin terminó y quiso matarla, ya se había enamorado de ella. A partir de aquí vivieron muy felices. Por Younes, 4ºESO
0 Comentarios
|
AutoresAlumn@s de ATAL Archivos
Abril 2019
|